A nueve meses de que el sindicato estatal de burócratas refrendó, mediante proceso electivo, la permanencia de Jervis García Vázquez como su secretario general, empleados disidentes insistieron hoy ante un tribunal con la presentación de recursos de impugnación.
El líder del Sindicato de Trabajadores al Servicio del Poder Ejecutivo e Instituciones Descentralizadas de Yucatán (STSPEIDY) planteó que un reducido grupo de trabajadores encabezado por Waldemar Pech Gasque persiste en cuestionar la legalidad de los comicios internos de febrero pasado.
Este jueves se realizó la audiencia alusiva a la demanda y excepciones, pruebas, alegatos y resolución en el Tribunal de los Trabajadores al Servicio del Estado, en la que jurídicamente se demuestra, dijo García Vázquez, la “improcedente, injusta y obscura demanda”.
Expuso que desde marzo pasado, el gobierno de Mauricio Vila Dosal reconoció la personalidad jurídica del gremio y su comité directivo, luego de que éste recibiera la toma de nota correspondiente de parte del mencionado tribunal.
El proceso de impugnación se basa en presuntas violaciones al artículo 9 de los estatutos del STSPEIDY, el cual menciona que para contender o ser parte de una planilla el aspirante no debe desempeñar ningún cargo en el Comité Ejecutivo, precepto que supuestamente incumplió el actual dirigente.
Jervis García aseguró que la representación jurídica sindical demostró la falta de sustento legal de cada uno de los alegatos de los inconformes, los cuales, apuntó, “se aferran al espectáculo mediático en desesperado intento de llamar la atención”.
Mencionó que los trabajadores del Gobierno del Estado se esmeran en cumplir sus funciones para responder a la delicada situación social y económica que se vive por la pandemia y los efectos de tormentas.
Sin embargo, puntualizó, el grupo que encabeza Pech Gasque se desvía de sus responsabilidades laborales y está entregado “a la grilla sindical en horarios de trabajo”.