Un documento interno del sistema del metro de la Ciudad de México revela que un año y ocho meses antes del accidente más mortífero en 50 años de ese sistema de transporte público capitalino, la entonces jefa de gobierno, Claudia Sheinbaum Pardo, fue advertida de los problemas estructurales del poste 10-27, pero por andar en campaña la corcholata presidencial nunca le dio la importancia debida al aviso y simuló el mantenimiento, cuyas partidas presupuestales se ejercieron en el papel.
La evidente omisión del gobierno de Sheinbaum Pardo costó la vida de 27 personas y otras 80 quedaron lesionadas el 3 de mayo de 2021 cuando ese paso elevado y dos de los vagones finales del tren se desplomaron en la avenida Tláhuac.
En su cuenta de X (antes Twitter), Guacamaya Leaks difundió copia del oficio SIE/1017/2019 fechado el 17 de septiembre de 2019, en el cual el Ing. J. Concepción Ortega Vargas, subgerente de Instalaciones Eléctricas, advirtió que el poste 10-27 tenía un movimiento anormal . “al parecer por deficiencias en su fijación” y solicitó una revisión estructural de esa infraestructura.
Claudia Sheinbaum prefirió posar para fotografías falsas, fingiendo que ella misma realizaba labores de limpieza en el metro. La desgracia desnudó su criminal omisión.
Investigaciones posteriores a la tragedia revelaron que el puente se había diseñado y construido sin seguir los estándares de calidad, que la construcción y los cambios de diseño de la línea no habían sido adecuadamente supervisados, que faltaban elementos de fijación y seguridad, y que los controles de mantenimiento periódicos que habrían detectado la falta de estabilidad de la viga no se habían llevado a cabo.